14/12/08 Alberto Surio
Jesús Eguiguren (Aizarna, 1954) empieza a asociar los días de lluvia a cierta imagen trágica de Euskadi. Su deseo es ver el sol «y que el cambio político sea posible en primavera», añade. Y que la estrategia contra ETA «deje de ser una carrera a ver quién es el más duro».
-La izquierda abertzale también parece que está deseando que el PNV pase a la oposición.
-Pues hasta ahora siempre que ha habido esa posibilidad han apoyado al PNV. Si tenemos un lehendakari socialista va a ser sin su apoyo.
-¿Cree que esa izquierda abertzale se presentará a las elecciones?
-Supongo que presentarán alguna lista que no será legal, y luego harán victimismo y defenderán la abstención. Pero en el caso de que estuvieran en el Parlamento lo que no haremos nunca es lo que ha hecho Ibarretxe en las dos últimas legislaturas: Patxi no saldrá elegido con su apoyo.
-¿Y la insistencia del PP en pedir la disolución de los ayuntamientos gobernados por ANV?
-No se puede estar todo el día como en una carrera a ver quién es el más duro, el más firme, quién hace más daño al Gobierno… Ya es hora en este país de hacer las cosas con una cierta calma y tranquilidad. Disolver ahora los ayuntamientos de ANV no sé si será legalmente posible pero es de una trascendencia en un estado democrático tan grande que primero habrá que hablar con todos los partidos, con el PNV, EA y Aralar incluidos. Estas decisiones deben partir de un gran acuerdo democrático. El PP utiliza esto como pura propaganda. Debe asumir que el consenso hay que buscarlo en el País Vasco, no sólo en Madrid.
-¿Cree que Ibarretxe ha encerrado en un cajón el discurso por el derecho a decidir?
-Es que no lo puede encerrar porque lo tiene en la cabeza.
-Pues el PNV se está ‘centrando’ en la actual coyuntura de crisis…
-Porque vienen las elecciones autonómicas.
-¿Qué piensa de la propuesta de Urkullu de aplicar la fórmula del Concierto Económico a un nuevo pacto político con el Estado?
-Como fórmula intelectual o jurídica me parece que lo que hay detrás es un retorno a un cierto autonomismo, pero está bastante mal planteado porque Concierto Económico sin democracia política no es nada. El Concierto en el terreno político es el Estatuto, que se podrá reformar o actualizar. Al fin y al cabo el Concierto también existió con Franco.
-¿Cabe incorporar el derecho a decidir en una futura reforma estatutaria?
-Nosotros no vamos a admitir nunca doctrinalmente el derecho de autodeterminación, pero si hay consenso político estamos dispuestos a incorporar la posibilidad de una consulta legal en aquellas competencias que nos correspondan en una reforma del Estatuto, tal como lo han hecho los catalanes y los andaluces, así como la introducción del mecanismo de los derechos históricos.
-¿Sigue pensando que es posible explorar esa vía de los derechos históricos?
-Sí, siempre y cuando se contemplen en el marco estatutario.
-Tantos años en la brecha y dando vueltas a los mismos problemas. ¿No le desanima?
-Eso puede producirse sólo cuando estás bajo de moral, pero ahora estamos muy animados porque al final de tantos años estamos viendo la oportunidad de un cambio. Hay una luz en el túnel.
-Quizá en un país normal usted se hubiera dedicado a otra cosa.
-Pues supongo que sí. Dedicarse a la política es duro en Euskadi y en otros sitios demasiado fácil. Aquí te juegas algo más que ganar unas elecciones, aquí te peleas sobre principios y valores. Yo tenía otras inquietudes vitales. La Universidad, por ejemplo. Pero hacer política en Euskadi ha sido y es un privilegio.